Tras un par de años de ausencia, la Fórmula 1 volvió al circuito callejero de Marina Bay en Singapur, el cual dio problemas a los pilotos, incluyendo a Checo Pérez, en el primer día de prácticas libres.
En la primera sesión de entrenamientos, el mexicano batalló de principio a fin en un Red Bull que denota la falta de renovación de algunos componentes y aunque se situó en la cuarta posición, la brecha entre él y el primer lugar fue de casi un segundo.
A la mitad de la sesión, una bandera roja que provocó Lance Stroll detuvo las accione spor casi 20 minutos. El canadiense golpeó el muro en la salida de la curva 5 y su monoplaza se averió en la pista.
Lewis Hamilton aprovechó los pocos minutos que quedaron en la reanudación para poner neumáticos blandos y marcar el mejor tiempo de vuelta, superando a Verstappen y Leclerc, que lideraban el clasificador.
Para las últimas prácticas los problemas para el mexicano fueron más evidentes al quedar relegado en la novena posición, en parte porque la pista se encontraba peculiarmente ocupada.
Los líderes en esta ocasión fueron los pilotos de Ferrari, encabezados por Carlos Sainz; los de Maranello aprovecharon que Verstappen estuvo gran parte de la sesión en el garage realizando cambios.