El mexicano remontó tras ser penalizado y finalizó en la sexta posición de un Gran Premio de Italia que tuvo por ganador a Max Verstappen, el cual extiende su ventaja en el campeonato.
Checo tuvo un inicio complicado con los neumáticos de su primer stint, los cuales se esfumaron en rendimiento de manera rápida y que le obligaron a parar por el compuesto duro a tan solo 8 vueltas de iniciar la carrera.
Quien sí concretó la remontada fue el campeón del mundo, quien por sanciones debió largar desde la séptima plaza y que en las primeras vueltas escaló hasta la tercera posición, haciendo valer el gran ritmo de su Red Bull.
El duelo estratégico fue clave en la contienda por la victoria. Tanto Red Bull como Ferrari aprovechaban las ventanas disponibles de paradas en boxes para intentar batir a su rival.
Sin embargo, la escudería austriaca fue quien se impuso sacando tajada de un cuestionable cambio de llantas para Leclerc durante un coche de seguridad virtual que terminó mientras el monegasco aún seguía en el pitlane, lo cual le hizo perder valiosos segundos y prácticamente el liderato de la carrera.
La estrategia también favoreció al mexicano, pues una vez que se encontraba en la parte trasera, comenzó a adelantar a diestra y siniestra y con el cuidado de los neumáticos que le caracteriza le valió para ponerse en la zona de puntos.
Rumbo al final de carrera, el monoplaza de Daniel Ricciardo sufrió una avería en la unidad de potencia, provocando su abandono y la salida del coche de seguridad para poder retirar su McLaren.
Parecía que se viviría un final de una vuelta, como en Abu Dhabi 2021, no obstante, los procedimientos de la dirección de carrera y de los comisarios de pista estuvieron lejos de ser los óptimos y la carrera concluyó bajo el safety car.
