El encuentro entre Troyes y Rennes tuvo un momento de incertidumbre luego de que un arbitro se desmayara minutos antes del comienzo del partido.
Momentos antes del comienzo del encuentro el silbante Florent Goncalves de Araujo cayó en el césped del Estadio de l´Aube, restrasando así el comienzo de, partido para atenderlo.
Los jugadores se reunieron para auxiliar de primera instancia al arbitro, para que después los servicios médicos del estadio entraran a hacer su trabajo y se llevaran al arbitro a una valoración.
El silbante se llevó una ovación por parte de los asitentes para ser retirado minutos después de la cancha, mientras que por su parte el partido sufrió un retraso de 15 minutos.