En una entretenida carrera en el Honda 200 de Mid-Ohio, el piloto regiomontano volvió a sufrir por problemas de fiabilidad en el motor de su Arrow-McLaren y abandonó la competición.
El mexicano buscaba capitalizar la Pole Position conseguida el día anterior y tuvo un inicio sólido en la carrera, manteniendo el primer puesto desde la largada.
Los problemas para O’Ward se presentaron a partir de la vuelta 28, cuando a través de la radio comentó a sus ingenieros que los mapeos del motor no funcionaban regularmente.
La pérdida de potencia se hacía más evidente conforme la competencia avanzaba y O’Ward comenzó a perder posiciones en pista, bajando al sitio 4.
Durante su última detención para cambio de neumáticos, la carrera del mexicano terminó de manera definitiva al tener que aparcar el coche por un problema en el sistema de bombeo de combustible.
El neozelandés Scott McLaughin terminó conquistando su segunda victoria de la temporada y sumando importantes puntos en el clasificador del campeonato.